miércoles

Cállate, estoy hablando con el Silencio.

Hay muchos tipos de silencio. El silencio que duele como lija en una pareja enfadada, el incómodo silencio de unos casi desconocidos cuando se acaba el tema de conversación. El que sirve de respuesta para una pregunta difícil, el de alguien que ha decidido abandonarse para morir. Pero yo, sin duda, me quedo con el silencio de un gran grupos de amigos, ese silencio que no importa, que al día siguiente ni se sabe que estuvo puesto que fue tan solo como una pausa para continuar riendo rato después. Me quedo con el silencio confidencial de unas amigas que por dentro se están partiendo de risa. Me quedo con el silencio de una madre que sostiene a su hijo recién nacido en brazos. Me quedo con el silencio que se posa en nuestras bocas cuando algo extraordinario, poco común como el amor verdadero, sucede.

No hay comentarios:

Publicar un comentario